Ingrid Encina: Desde Miami con mucho sabor a Chile

Sabores Chilenos no es sólo un restaurante para probar comida típica. A 17 años de su inauguración, se consagró como un pedacito de nuestro país que reúne nuestra cultura y nuestro folclore. Ingrid Encina, su propietaria, me atendió a las 14 horas de un día lunes. Ése es el horario en que tiene algunos minutos para descansar antes de seguir trabajando. Poco a poco, me comenzó a hablar de las emociones que guarda hacia su tierra, y de los fracasos y triunfos vividos desde que reside en Estados Unidos, hace ya 24 años. En su local ubicado en la 10760 West Flagler Street, me recibe con su mejor sonrisa.

Por Camila Mendoza Muñoz* (desde Miami).

Ingrid Encina.
Ingrid Encina.

“Soy una empresaria porque me ha tocado administrar mi negocio junto a mi esposo y somos nosotros quienes fabricamos nuestros productos, pero también soy una emprendedora porque todos los días estoy buscando cómo crecer. Siempre estoy inventando cosas y dando a conocer nuestro país al resto del mundo”.

Así se define Ingrid, una chilena que llegó en su luna de miel a Estados Unidos, y que junto a su esposo decidió quedarse y echar a volar sus sueños. Pasó nueve años indocumentada, pero logró abrirse camino en este difícil país con mucho sacrificio y perseverancia. Hoy es una gran empresaria gastronómica, lo que la hizo ser reconocida entre los 100 hispanos más influyentes de Miami.

-¿Cómo fue llegar a este país?

-Fue dejar mucho y llegar a un lugar desconocido, sin tener mucha información, sin saber lo que significaba quedarse sin documentos. Empezar en un mundo donde ni siquiera el idioma era el mío. Pero también tuvo un lado positivo, porque aquí pude conocer muchas culturas y convivir con ellas… nunca pensé que iba a tener amistades de todas partes, nunca pensé que iba a conocer la forma de vivir de tantos lugares. Ésa es la gracia que tiene Miami, poder conectarte con el resto del mundo, estando sólo en una ciudad.

El restaurante de Ingrid es el punto de encuentro de una comunidad y la ventana para el resto de las comunidades que quieren conocer Chile. Esta mujer ha tenido grandes logros personales y profesionales, por eso como compatriota, no puedo evitar sentir orgullo al escucharla.

“La cocina en mí es innata, no la estudié. Empecé a preparar empanadas, a la gente le encantaban, y me lancé hasta que mi casa se convirtió en una fábrica de comida chilena”, manifestó Ingrid.

-¿Cómo fueron los comienzos de la empresa?

-Cuando hice mi tarjeta de presentación y publiqué anuncios, fue difícil porque en esos años prácticamente nadie conocía Chile, y encontrarse con chilenos en Miami era muy difícil. Yo estaba apostando a una comunidad que hasta el día de hoy es una minoría en Estados Unidos.

Ingrid estuvo nueve años indocumentada, pasaban los meses y no conseguía su residencia y se encontraba corriendo el riesgo de ser deportada.

-¿Qué le recomendarías a todos esos chilenos que quieren venir a probar suerte como tú?

-Yo siempre les digo. Si piensan venir a vivir a Estados Unidos, lo primero que tienen que hacer es venir con permiso de trabajo, y con alguna posibilidad de residencia. Antes de pensar en el sueño americano, piensen en cómo llegar con documentos en la mano, no es tan fácil salir adelante sin documentos, ésa es la realidad. Ya no se puede venir a Estados Unidos a aventurarse como lo hice yo, porque eran otros tiempos.

-¿Cómo fue pasar nueve años indocumentada?

-Fue complejo, pero en 1988 cuando llegué no era tan difícil como lo es hoy, porque con el pasaporte uno podía sacar licencia de conducir y tener social security. Antes de que ocurrieran los atentados del 11 de septiembre, no era tan difícil vivir sin documentos. Actualmente estar indocumentado aquí es terrible.

Ingrid se reconoce más chilena que los porotos, pero dice que ha adquirido las cosas buenas de los americanos. Ser más directa por ejemplo, dar pocas vueltas para decir algo y respetar el tiempo de las otras personas.

-¿Qué es lo que más te molesta de Chile viéndolo desde afuera?

-De Chile me carga el clasismo. Aquí uno puede dedicarse a limpiar casas y nadie te mira en menos por eso. Valoro esas cosas de Estados Unidos. Chile sigue siendo un país muy clasista.

Hispana influyente en Miami

Ingrid lanzó su propio libro de recetas y un Reserva Privada Cabernet Sauvignon, también bajo el alero de la marca Sabores Chilenos.

“Lo del libro de recetas es un sueño hecho realidad, cuando empezamos con este restaurante, un periodista me dio la idea, y me propuse hacer las recetas de Sabores Chilenos. Utilicé las medidas de Estados Unidos, para que la gente que no es chilena, cocine comida chilena”.

-¿Cómo fue ser nombrada entre los 100 hispanos más influyentes en Miami?

-Yo al comienzo no le tomé el peso al reconocimiento, pero cuando fue la premiación en la Florida International University, y me acompañó el cónsul chileno me di cuenta del alcance de ese reconocimiento. Ahí me regalaron un libro empastado con la historia de Miami, y nos sacaron una foto gigante que estuvo muchos meses en el aeropuerto de la ciudad.

Ingrid Encina y Camila Mendoza.
Ingrid Encina y Camila Mendoza.

-¿Cuál es tu relación con Chile?

-Yo estoy totalmente conectada con mi país, aquí está mi fuente laboral, pero mi conexión con mi patria es única, disfruto mucho cuando viajo y además tengo televisión chilena aquí. Cuando suceden tragedias allá, nosotros somos el centro de información para mucha gente, la prensa americana se deja caer aquí cada vez que sucede algo en Chile.

-¿Cuál es tu consejo para las personas que están comenzando a luchar por sus sueños?

-La base de la vida, para mí, es creer en Dios. Conectada con Dios, Él te va a encaminar. Después tienes que ir enfocando tu vida, estudiar, prepararte, no importa lo que se estudie, pero ser el mejor. Avanzar proponiéndonos metas. Si yo no me hubiese planteado metas, me hubiese quedado en la casa haciendo empanadas toda la vida, pero no, siempre estoy avanzando… Eso es lo que le falta a Chile, falta soñar, ampliar las expectativas. Si tienen oportunidades no las pierdan. Aprovechen de conocer el mundo.

-¿Cuál es tu meta ahora?

-Mi meta es sacar mi segundo libro. Aún estoy reuniendo el dinero para eso porque tiene muchas fotografías con alta resolución, es un libro a todo color. También tengo la meta de disfrutar más.

-¿Volverías a Chile?

-No lo sé… me gusta esta ciudad, me gusta el clima de Miami, me encanta la playa. Cuando me jubile me veo en un departamento en Miami Beach, ríe. Me encanta vivir en Estados Unidos, me gustan las oportunidades que como latina tengo aquí, y me gustan las cosas que puedo hacer por mi gente de Chile.

* Camila Mendoza es alumna de cuarto año de nuestra carrera.