Alejandro Valenzuela, Premio Universidad de Concepción 2020: “Cada uno tiene que encontrar lo que lo apasiona y desde ahí comunicar”

Reconocido por la casa de estudios por su notable desempeño académico en la carrera, el periodista nos cuenta de sus proyectos y sus motivaciones.

Por María Paz Rudnick

Alejandro siempre quiso estudiar periodismo. Durante su adolescencia y en sus años como estudiante de Derecho, asumió naturalmente las responsabilidades asociadas a las comunicaciones en proyectos que desarrolló con amistades y compañeros. Hacerse cargo de la página de Facebook o crear un video eran tareas que lo atraían, en una época en que aún no iniciaba sus estudios en la carrera que realmente lo cautivaba.

No se arrepiente de esos tres primeros años que pasó como estudiante de leyes, por el contrario, la experiencia le permitió desarrollar su gusto por la política y la cultura, áreas donde concentró sus energías durante los cinco años de estudios en Periodismo UdeC. Hoy su alma mater lo reconoce como Premio Universidad de Concepción 2020, galardón que distingue anualmente a los y las estudiantes que logran un notable desempeño académico en sus respectivas carreras.

Vocación por comunicar

Para Alejandro, una de las ventajas de ser periodista es poder trabajar en aquello que lo apasiona y uno de esos temas es la identidad penquista. Se declara fanático de Concepción y reconoce que la mayoría del trabajo que desarrolló durante la carrera se vinculó al territorio y a la cultura local. “Desde chico tuve buenos profes de arte y de música. Nos llevaban a ver música, teatro, orquestas y en ese periodo me enamoré de la cultura penquista”, relata.

Para él, ser periodista es un camino que se construye de manera personal y que requiere abocarse a varias tareas, que implican tomar decisiones y desarrollar diversas capacidades. La primera tarea es definir aquello que se quiere comunicar y reconocer el impacto que ese mensaje puede tener en la sociedad. La segunda, es tener la voluntad de explorar los distintos formatos que existen y atreverse a comunicar desde todos ellos. La tercera, es ser capaz de trabajar en equipos multidisciplinarios y abrirse a comprender el lenguaje de otros profesionales.

“El periodismo no es una carrera fácil, no es un hobby, es una vocación por querer comunicar y esa es una responsabilidad muy grande que se nos delega como periodistas, como comunicadores, porque permeamos la sociedad completa y más aún en estos tiempos de incertidumbre”, comenta Alejandro. El premio que le entrega la UdeC – una beca para estudiar un magister en la casa de estudios- lo tiene contento, pero lo pilla lleno de proyectos.

“Con el newen de la gente”

Fue en sus semanas finales de práctica profesional telemática en el Diario Concepción en 2020 cuando recibió la invitación a trabajar como periodista del entonces candidato a constituyente mapuche, Adolfo Millabur. La cobertura mediática a la discusión sobre escaños reservados para pueblos originarios en la Convención Constituyente, lo llevó a conversar en un par de ocasiones con el ex alcalde de Tirúa, a quien admiraba por su prestigio en el movimiento mapuche.

La oferta era una oportunidad valiosa para Alejandro y la tomó. Terminando su práctica, se convirtió en el periodista de medios digitales de Millabur. Pronto debió armar y liderar el equipo de comunicación digital. “Era una campaña muy compleja porque era un distrito nacional, era todo Chile y debíamos ser capaces de llegar a todo el territorio”, comenta. Recuerda que durante tres meses viajó por el país, participando en reuniones, empapándose de la cosmovisión mapuche, mientras aplicaba conocimientos de comunicación estratégica y redes sociales en las plataformas digitales del candidato. “Con el newen de la gente, Millabur Constituyente” fue el eslogan de una campaña intensa y exitosa, que hoy le permite continuar desempeñándose como asesor comunicacional del constituyente en temas digitales.

Paralelamente, planea trabajar como periodista en cuatro proyectos FONDART, dos de los cuales se adjudicó el año pasado junto con el Colectivo Leufü. A cargo de la estrategia de difusión, se declara orgulloso de la labor realizada y espera poder cumplir con todos los compromisos que asumió, abordando aquellas áreas de desarrollo que eligió y de las cuales habla con tanta pasión. “La política y la cultura para mí están de la mano, el cambio que estamos viviendo hoy día es un cambio cultural netamente. Si uno logra permear la cultura con ideas, con valores, con la idea de transformación, de cambio, evidentemente los procesos políticos se van a acelerar”, concluye.